Intervención
La Senyera fue intervenida con anterioridad, concretamente en el 2003 por los técnicos contratados por la Consellería de Cultura.
Esta última actuación ha devuelto la unidad y la estabilidad a las piezas textiles, reintegrando y consolidando las áreas deterioradas, además de eliminar los agentes de deterioro presentes que contribuían a su degradación.
Se ha practicado una microaspiración con ayuda de pincel para eliminar la suciedad superficial.
Al conjunto de la pasamanería que presentaba perforaciones por ataque de xilófagos se le realizó un tratamiento por anoxia.
Para eliminar las deformaciones existentes fue necesario hidratar las fibras con vapor frío, el secado se produjo lentamente, de forma natural, bajo el peso de los cristales y los plomos.
El deficiente estado de conservación que presentaba hizo aconsejable que la Senyera permaneciera totalmente desplegada en un soporte o cama blanda.
Finalmente, la bandera quedó unida a esa base mediante líneas de sujeción que se repartieron por toda la superficie de forma alternada y compensando pesos y tensiones, colaborando también en la corrección de las deformaciones ocasionadas por su deficiente confección.
A petición expresa de la propiedad, la pieza debía ser expuesta en vertical, por esto ha sido necesario realizar un mayor número de líneas de sujeción y de diferentes tamaños.
Una vez fijada al soporte, se inició la consolidación de las zonas que presentaban desgarros y se fijaron las láminas metálicas desligadas. No fue necesario utilizar un soporte parcial extra. Se ha considerado más idóneo, dado el estado que presentaba el tejido original, utilizar el propio tejido de soporte. Empleando para ello hilo seda de color similar al fondo (tintado en el propio departamento C+R) y punto de restauración o punto de fijación en el caso de las láminas.
La pasamanería de fleco perimetral que remata la bandera fue desenredada y alineada con ayuda de una pinza.
Una vez estuvo colocada la Senyera en la vitrina, se cosieron las borlas a las puntas.