ESCULTURA
Virgen con Niño del Templo de Santa María La Mayor
Virgen con Niño
Iconografía
La composición responde al tema mariano de la Madonna o Virgen con el Niño, tratando a la Virgen niña como madre en actitud sensible y serena con su hijo, a la vez que solemne, por ser éste el hijo de Dios.
La Virgen de pie sujeta al niño Jesús con su mano izquierda, mientras que con la derecha parece sostener un lirio, azucena o un pequeño báculo flordelisado, ya perdido. El rostro de la Virgen mira al frente, con la mirada caída en un gesto tranquilo. El Niño, sentado en el antebrazo de su madre, tiene las piernas cruzadas, mostrando la derecha por detrás de la izquierda. Su brazo izquierdo reposa cariñosamente en la mano de la Virgen, mientras que el derecho está en acto de bendición. Su rostro aparece muy resuelto y dulce, esbozando una sonrisa y mirando al frente. Los cabellos de la Virgen han sido tallados en forma de ondulaciones, y caen desde el medio de la cabeza hacia ambos lados, ocultando sus orejas y cubriendo sus hombros. Los cabellos del Niño, en cambio, son rizados y cortos, distribuidos por la superficie de la cabeza desde la coronilla.
Una túnica de corte sencillo viste a la Madre de Dios, sólo en el cuello un pequeño dobladillo en el pecho y cubriendo el final de las piernas decora el manto, abrochado sobre el pecho mediante algún tipo de botón o broche actualmente perdido. El Niño, por su parte, viste un manto semejante al de su madre, abrochado con el mismo tipo de botón que también se encuentra perdido.
Atribución
Anónimo – Finales S XV principios del XVI
Técnica
Talla en madera policromada y dorada.
Dimensiones
100 x 35 x 21 cm.Estado de Conservación
Soporte
Se trata de una escultura de madera de medio bulto ahuecada por el reverso. Tanto la Virgen María como el Niño Jesús fueron realizados a partir de un único bloque de madera a excepción de la mano derecha de ambos.
La madera empleada presenta, por causas de crecimiento botánico, una serie de fendas onduladas que recorren prácticamente toda la escultura. Estas fendas probablemente motivaran el enlienzado o entelado de la superficie de la madera. El tipo de tejido empleado varía según las zonas, en las doradas (manto y túnica) utiliza un tafetán basto de lino blanco, mientras que en las policromadas (cuello y manos) emplea un sutil tafetán de seda de tinción verde.
Como consecuencia de la exposición de la talla a los cambios bruscos de humedad y temperatura, probablemente debido a su ubicación en el exterior o sometida a lluvias continuas y a la acción directa del sol, las fendas presentes se acrecentaron y generaron grietas en la estructura pictórica original. Ello incentivó en mayor medida la aparición de nuevas fendas y el agravamiento de las ya existentes.
Asimismo la madera, se vió sometida a las ovoposiciones de los insectos xilófagos (Anobium punctatum), cuyas larvas generaron una profunda red de galerías en la zona inferior de los pies de la Virgen, pliegues del manto y manos.
Se localizaron pérdidas puntuales de soporte leñoso en los cuatro dedos de la mano derecha de la Virgen, así como en parte del pie derecho del Niño.
Estrato de preparación
Tanto el estrato de preparación y de bol se encontraban perdidos en la mayor parte de la escultura. Las áreas con mayor alcance se localizaban en la zona superior del cabello de la Virgen y el Niño, en la túnica y en el manto concretamente en la zona del pecho, y en los pliegues de los mismos
En otras zonas, más protegidas de los elementos atmosféricos, los estratos de preparación habían perdido cohesión presentando un carácter pulverulento. Únicamente aquellas áreas provistas de policromía y resguardadas del alcance de la humedad directa mantenían mayor proporción de estratos de preparación.
Película pictórica y dorados
Las áreas de soporte atacadas por xilófagos o afectadas por fendas profundas habían perdido prácticamente toda la película pictórica. Lo mismo ocurría en las áreas doradas de la parte central del manto y la túnica. Las zonas menos expuestas aún conservaban ciertas áreas doradas, pero la mayor parte de los dorados habían sido barridos, dejando a la vista el bol rojo.
A esta pérdida por solubilización cabe sumar una serie de pérdidas por descamación y levantamientos en cordillera, fruto de las tensiones desarrolladas por los continuos ciclos de sorción y desorción extremos.
La película pictórica que conforma los rostros de la Virgen y el Niño Jesús no había sufrido tanto esta pérdida, si bien eran grandes las áreas perdidas, no solo por cambios termohigrométricos, sino también por golpes y excoriaciones sobre su superficie.
Por todo ello, en alguna época a principios del siglo XX, se decidió cubrir toda la superficie de la obra con varias capas de repolicromía blanco grisácea. Su composición se entremezclaba con los pigmentos originales migrados a la superficie, y con estratos de suciedad superficial, polvo y arena adheridos. Todo ello cubierto por una densa capa superficial de polvo y suciedad ambiental.
Intervención
Tras analizar los sucesivos estratos de repolicromía, se resolvió retirar la mayor proporción posible de repinte ya que prácticamente ocultaba la totalidad de la policromía y dorado original.
Se realizó en primer lugar una limpieza mecánica de toda la obra con el fin de retirar los depósitos de arena, polvo y otro elementos. Tras este proceso, se procedió a proteger y consolidar puntualmente aquellas zonas de policromía y dorado susceptibles de sufrir riesgo de desprendimiento.
Para abordar la eliminación de los depósitos de repolicromía, se realizaron una serie de test de solubilidad, con el fin de verificar la elección de la sustancia idónea para retirar dicho estrato sin menoscabar en la integridad física, estética e histórica de la policromía y dorado original. Se trabajó con geles acuosos y disolventes espesados para reblandecer los estratos más persistentes, y la capa más en contacto con la superficie pictórica y dorada original fue retirada mecánicamente.
Una vez eliminado el repinte el primer tratamiento realizado fue el de protección-fijación del estrato de policromía y dorado, seleccionando los materiales en función de las áreas a tratar. De esta forma, se emplearon en los dorados adhesivos sintéticos, y en los levantamientos de todo el estrato o en descohesiones generalizadas colas orgánicas, aplicadas mediante inyección o filtrado, y con calor moderado.
Tras la consolidación, se aplicó un primer barniz de protección en las áreas de dorado y policromía. El estucado se realizó con una base de cola orgánica y carbonato de calcio, sobre la cual se aplicaron varias manos de bol amarillo y rojo en las zonas de dorado. Con respecto a la policromía, se reintegró cromáticamente con colores al agua, y se ajustó con colores al barniz. Finalmente se aplicó un barniz mate de protección mediante pulverización.
Respecto al soporte de madera este había sido repintado con los depósitos de serrín generados por los insectos xilófagos, de forma que el primer paso antes de consolidar su estructura fue el vaciado de los orificios para evita daños derivados de la acidez de dichos depósitos.
La red de galerías provocadas por los insectos xilófagos se entrecruzaba en determinadas zonas, poniendo en peligro el estrato pictórico y haciendo precaria la conservación de la madera del soporte.
Se realizaron diferentes estudios con el fin de determinar el consolidante más adecuado. Se decidieron emplear resinas sintéticas en un medio hidroalcohólico, para evitar la aportación de brillos o cambios de tono.
Otro de los elementos de soporte que requirió de consolidación fue el tejido del enlienzado, cuya estructura había perdido adhesión al soporte de madera y en muchos casos se había replegado y encogido. Se valoró dejar estos tejidos a la vista como elemento didáctico original de la imagen, ya que muestra la obra tal y como se construyó a través de sus sucesivos estratos de transición entre la madera y el dorado.
Tras la consolidación del soporte, se procedió a la fase de reconstrucción volumétrica mediante masilla de relleno. Así se decidió reconstruir las áreas afectadas siguiendo un criterio de integridad mecánica y no tanto estética, tratando de crear un perímetro estable en torno a las áreas con policromía o dorados, y cerrando aquellas fendas no significativas que pudieran suponer riesgo para las mismas.
La inestabilidad que presentaba la obra, debido a la falta de cohesión en su base y al grave ataque xilófago obligaron a idear un sistema se sujeción que aislara dicha base original del área donde fuera a exhibirse la imagen, a la par que corrigiera el vencimiento de la misma a causa de la pérdida de soporte.
Se decidió realizar una peana en forma de paralelepípedo rectangular en madera de haya en tono crudo.
Todos los elementos metálicos al no ser elementos originales de la obra se decidieron conservar pero no fueron colocados de nuevo en la imagen.
Estudios técnicos, científicos y radiológicos
- Documentación fotográfica mediante diferentes fuentes de iluminación:
– Fotografía con luz visible.
– Fotografía mediante fluorescencia visible inducida por luz ultravioleta (UV).
– Macrofotografías. - Análisis de materiales. Estudio en sección estratigráfica.
-Microscopia estereoscópica.
-Microscopia óptica visible y ultravioleta.
-Microscopia electrónica de barrido (SEM) con sistema de microanálisis de dispersión de energía de rayos-X (EDX). - Estudio radiográfico (RX).
- Estudio Tomográfico (TC).
- Test acuoso y de solubilidad.